|
10 de Mayo 2009*. Segundo Domingo de Mayo |
||
|
A Valencia le cabe el honor de haber sido la cuna de esta advocación mariana, de signo profundamente humano y universal, Una historia, trágica y consoladora a la vez, señala su proceso de formación a lo largo del siglo XV, el que posiblemente registra el mayor apogeo religioso, artístico y comercial de la vieja ciudad mediterránea. |
|
El origen de esta sagrada imagen va unido a una de las glorias valencianas, como es la fundación de su antiguo hospital, el primero en el mundo, destinado a pobres dementes y desamparados. Conmovido profundamente el Rvdo. Padre Jofré, de la Orden mercedaria, ante el triste espectáculo de unos niños que maltrataban a un loco, de tal suerte intentó remediarlo, que encendidos unos piadosos |
||
pechos pusieron en práctica el pensamiento del comendador de esta Orden y se constituyó, al momento, una Cofradía para sufragar los gastos del hospital, previas las oportunas amortizaciones que concedió el Rey D. Martín, por Decreto dado en Barcelona a 30 de noviembre de 1409 y la Bula memorable en que fueron aprobadas las Constituciones por el Papa Benedícto XIII y el Rey D. Fernando de Aragón, en agosto de 1414. |
Desde los primeros tiempos de la Cofradía, como exigencia también de los gustos de la época, se veneró una imagen considerada como titular. Esta imagen se pensó para que se pudiese colocar sobre los feretros de los inocentes y ajusticiados. Esta finalidad del sagrado simulacro explica el material ligero y fuerte en que está construido, los pliegues del ropaje de la dorada talla gótica, concebidos en sentido horizontal, y, especialmente, la inclinación de la cabeza, propia de su posición originaria de descanso sobre un almohadón. La imagen se llevaba a la diminuta capilla del actual Hospital Provincial, llamada "Capitulet", para presidir las reuniones o capítulos de la Cofradía; figuraba yacente en el entierro de los cofrades, dementes, ajusticiados o desamparados, y era llevada erguida sobre unas andas en las procesiones de las grandes solemnidades marianas. Primeramente recibió veneración en la casa de los clavarios; desde 1603 en la diminuta capilla exterior de la catedral, cedida por el Cabildo metropolitano a la Cofradía y, desde 1667, en la actual Real Basílica, construida por la Cofradía, y considerada como el centro espiritual de primer orden de la región valenciana. |
|
|
Nuestra Señora de los Desamparados Patrona de Valencia y su Comunidad |
||
Varios Sumos Pontífices, como Calixto III, Sixto V y Clemente VIII contribuyeron eficazmente al aumento de la devoción a la Virgen, concediendo indulgencias y otras gracias espirituales. Urbano VIII hizo su altar privilegiado; pero el paso gigante lo dio Benedicto XIII en 1725 con el rezo canónico de la santa imagen, consagrando así litúrgicamente para la Patrona el título de Madre de los Desamparados. Pío VII elevó este oficio al rito de primera clase con octava, y León XIII la declaró Patrona de Valencia y su reino. Sin embargo, Reina, como era hasta entonces, y Señora del pueblo valenciano, la Virgen, con tan dulce título, no estaba todavía coronada. La Providencia divina nos deparó tan glorioso acontecimiento en 1923, acto que contó con la presencia de los Reyes D. Alfonso XIII y Dña Victoria. Está devoción a la Virgen María bajo el título de Ntra. Sra. de los Desamparados ha tenido su repercusión en dos hermandades sevillanas como son la cofradía de San Esteban y la del Parque Alcosa, además de otra de carácter letifico radicada en la iglesia de San Vicente. En definitiva, esta es la gran innovación introducida en la liturgia, por el título de Madre de los Desamparados. Ni en el avemaría, donde llamamos a la Virgen Madre de Dios; ni en la salve, donde le decirnos Madre de la misericordia, refiriéndonos más bien a ser la madre de quien es la misericordia misma; ni en la letanía lauretana, ni en el misal y el breviario, aparece tan rotundamente proclamada la maternidad de la Virgen sobre todos los hombres como en este título de Madre de los Desamparados, sinónimo de Madre de todos los hombres, de los desterrados hijos de Eva, abrumados por el desconsuelo y el dolor. |
||
[ Portada ] [ Domus Dei ] [ Patronas ] [ Reportajes ] [ Glorias ] [ Reportajes ] [ Santoral ] |
Copyright © 2002- Rafaes |
|